Cada año, durante los meses de junio, julio y agosto, las Montañas Azules, celebran el 'Yulefest' comúnmente conocido como "Navidad en julio". El sábado más cercano al solsticio de invierno, el Winter Magic Festival se apodera de la región, de sus pintorescos pueblos y hoteles maravillosos. Una experiencia para no perderse, a sólo 90 minutos en auto de Sídney.
¿Qué significa Yule?
Yule es un festival pagano también llamado Solsticio de Invierno. En Yule vivimos la noche más larga del año. Aunque gran parte del clima más severo del invierno aún está por venir, celebramos la luz que viene, y agradecemos a los dioses por acompañarnos durante la noche más larga. Es un momento para mirar los logros del año pasado y celebrar con familiares y amigos. Desde este día hasta el solsticio de verano, los días se hacen más largos, todos los días desterrando un poco más la oscuridad en un resplandor de la cálida luz del sol que devuelve la vida al mundo. Este día es el primer día oficial de invierno. El día específico varía de un año a otro dependiendo de cuándo el Sol alcanza el punto más al sur de su caminata anual.
Este tipo de festividad se celebra en todo el mundo desde hace milenios, por todas las culturas que existen y han existido, con diferentes nombres y con diferentes tradiciones.
Orígenes de la Yulefest de las Montañas Azules
La historia detrás de los orígenes de la celebración de la Navidad en julio o Yulefest, es bastante interesante ya que el concepto y la adopción de la idea por parte de los locales, surgió por accidente.
En 1980, un grupo de turistas irlandeses visitaba las Montañas Azules en un intento por encontrar el clima de invierno despejado y fresco al que estaban acostumbrados en Irlanda. Mientras se relajaban en Mountain Heritage frente a un fuego, vieron que caían copos de nieve, y el viento los soplaba. Inmediatamente pensaron en la Navidad en el hemisferio norte. “Celebrar la Navidad en Australia durante el calor del verano simplemente no se siente igual”, le explicó uno de los miembros del grupo a Garry Crockett, su anfitrión y propietario de Mountain Heritage. Garry, que también era de ascendencia irlandesa, recordó las historias que su padre Bill contaba sobre ventanas esmeriladas, fiestas navideñas de pavo, jamón, pasteles de carne picada y budines de ciruela humeantes, y coros que se unían para cantar las alegrías de la temporada festiva.
El anfitrión, para complacer a sus invitados irlandeses, decidió proporcionarles lo que habían solicitado, y puso en marcha los preparativos con la colocación de adornos en todo el hotel, e incluso un árbol de Navidad. Durante las semanas de planificación, muchos invitados curiosos preguntaron sobre toda la actividad ... pensaron que era una especie de broma irlandesa: ¡simplemente no tienes Navidad a mitad de año!. Pero Garry , explicó la importancia de la ocasión, y que pronto realizaría una fiesta navideña tradicional con adornos y todo, para un grupo de irlandeses nostálgicos. Comenzó a correr la voz de este inusual evento festivo "fuera de temporada" en Mountain Heritage, y las consultas de otras partes interesadas que también querían disfrutar de una ocasión tan maravillosa y original, comenzaron a fluir. Esta idea fue tan popular que otros hoteles en las Montañas Azules siguieron su ejemplo y comenzaron a ofrecer productos y servicios de “Navidad en julio”. En unos pocos años, la celebración de Yulefest había sido bien acogida y adoptada.
La idea se fue extendiendo rápidamente y ahora, en julio, en la temporada alta de los centros de nieve australianos, las decoraciones navideñas y los eventos especiales se planean meticulosamente para atraer visitantes a las celebraciones de “Yulefest”. Muchas familias disfrutan de las vacaciones de invierno en estos lugares nevados, donde construyen muñecos de nieve mientras observan a Papá Noel cruzar velozmente alguna pista de sky, o simplemente recibiéndolos en algunas de las excursiones.
El invierno es un momento mágico en las Montañas Azules. Clima fresco y un cielo azul claro, perfecto para explorar al aire libre durante el día, seguido de comidas calientes y bebidas junto al fuego acogedor por la noche. Infinidad de aventuras por explorar, gran variedad de atracciones y actividades, ya sea colgando sobre el valle de Jamison en un teleférico con fondo de cristal, escalando las montañas en rappel o caminando por la antigua selva jurásica, pasando por arroyos sinuosos, cascadas y aborígenes. Visitar las Cuevas de Jenolan, que en esta época se iluminan con el espíritu navideño y se recorren teniendo como guía a Santa, deleite de grandes y chicos. O el Festival de magia de invierno, que es parte de Yulefest y de la celebración del solsticio de invierno. Toda la ciudad y todos los centros turísticos participan y crean un mágico país de las maravillas invernal para todos los huéspedes que acuden en invierno para celebrar la “Navidad en julio”. Los árboles de Navidad y las decoraciones, se pueden ver en todas partes y suena música navideña. El Winter Magic Festival llena las calles de Katoomba con artistas de todo tipo, así como puestos que venden sus productos con obsequios especiales alusivos a las fiestas. El entretenimiento incluye músicos, cantantes, gimnastas, bailarines y más.
Dicen que en tu primer viaje a las Montañas Azules se dedica simplemente a planificar el segundo, y si te tomás solo un par de días para conocer, debemos confirmar que es cierto.
Las Montañas Azules, son famosas por sus impresionantes paisajes, pintorescos pueblos y hoteles históricos. La zona es conocida por celebrar Yulefest, las celebraciones de Navidad en julio, en todo su esplendor, pero detrás de los adornos y las luces parpadeantes, la región ofrece mucho más que los habituales lugares turísticos.
Restaurantes históricos, con menús decadentes como el Darley, en Katoomba. Cruceros con almuerzo por el río Nepean Belle (en Jamisontown), a bordo del ícono acuático regional en su camino hacia o desde las Montañas Azules, junto a los acordes de villancicos populares, y el pintoresco telón de fondo de las escarpas. Experiencias con artesanos locales, y más. Cenas a las que se accede en automóviles antiguos, o con modernas ruedas deslumbrantes. Numerosos hoteles, desde los más lujosos 5 estrellas, hasta casas de huéspedes, B & B, cafés y restaurantes celebran el festival de invierno, amenizado por cálidos entretenimientos.
Yulefest in the Blue Mountains ofrece la atmósfera de estilo europeo que la gente asocia con la Navidad: un paisaje frío en el exterior y un ambiente acogedor en el interior con fogatas rugientes, comida y bebidas calientes, decoraciones tradicionales y música festiva.
Con su gran altitud, temperaturas frescas e incluso nevadas ocasionales, el invierno es un momento mágico en las Montañas Azules, que canaliza el espíritu festivo de una Navidad europea tradicional. Mientras la niebla suave se arremolina alrededor de los escarpados acantilados de arenisca, nada como calentarse ante un fuego crepitante con una copa de vino caliente especiado, o disfrutar de una cena asada en uno de los hoteles, o restaurantes con un estilo bien de las montañas, mientras celebras la Navidad en julio.
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