Algodón, seda, lino, terciopelo….cuidar los textiles de la casa, no sólo hace que luzca siempre impecable, sino que prolonga la vida útil de los mismos. Te dejamos algunas ideas que te ayudarán a conservar mejor los tejidos y ropa de la casa.
Algodón, seda, lino, terciopelo….cuidar los textiles de la casa, no sólo hace que luzca siempre impecable, sino que prolonga la vida útil de los mismos.
Te dejamos algunas ideas que te ayudarán a conservar mejor los tejidos y ropa de tu hogar.
Aunque parezca obvio:
- Lo primero que recomendamos es seguir siempre las indicaciones del fabricante. Ésta será la mejor garantía para no deteriorarlas.
-Si se trata una tela de color intenso, es mejor realizar los primeros lavados por separado.
-Cuando tengas diferentes elementos coordinados con la misma tela (colchas, cortinas, fundas, etc) procura lavarlos todas a la vez. De esta forma, impedirás que uno se desgaste más que el resto, y que se diferencien los colores.
- Siempre que sea posible, procura lavar las prendas del revés, ya que el roce entre ellas, los detergentes y el contacto con el tambor de la lavadora pueden acelerar el desgaste de la tela. Una buena opción , es usar fundas especiales para lavado de prendas delicadas, que resultan muy prácticas para conservarlas.
-Limita la cantidad de detergente (jabón de lavar la ropa). En exceso, puede dañar o incluso manchar algunos tejidos delicados, como la seda o el voile.
-Respeta la carga máxima de la lavadora, el exceso de peso provoca más roce entre la ropa, acelerando el desgaste de tejidos y su posterior rotura.
Texturas y trato:
-La suavidad de la seda y el lino : exigen un cuidado muy especial. La seda, no admite centrifugados ni temperaturas altas. Incluso al plancharlo, conviene hacerlo a baja temperatura ( menos de 110ºC). El lino, es mejor lavarlo a mano y a menos de 40ºC, ya que encoge y se arruga fácilmente.
-Preservar la textura del terciopelo: El tercipelo es una tela gruesa con relieve y de pelo denso. Para que no se apelmace, conviene lavarla a mano con agua fría. Durante el proceso, es importante evitar que se arrugue, ya que dejaría marcas descoloridas. Al plancharlo, hay que hacerlo del revés.
-Lavar tejidos de lana: se recomienda utilizar un programa suave y llenar el tambor sólo hasta la mitad, así evitarás la aparición de pelusa. Al tender un tejido de lana, procura hacerlo siempre horizontal. De este modo, la prenda no se estirará por el peso de estar mojada.
-El cuero, práctico y resistente: Para conservar las superficies de cuero, basta con pasarles periódicamente un paño blanco seco. Para nutrirlo, conviene encerrarlo o pasarle un aceite de vez en cuando. Si se trata de tapicería clara, puede pasarse vaselina o cera incolora. Importante, no recargar mucho el trapo con el producto, y distribuirlo en forma pareja .
- El Algodón, mejor con agua fría: aunque es fácil de mantener, el algodón encoje si se lava con agua caliente. Puedes evitarlo, si la primera vez lo lavas a 60ºC. Si es teñido, puedes fijar los colores si antes del primer lavado lo sumerges en agua fría con mucho vinagre.
- Toallas siempre mullidas: Las toallas de algodón blanco, pueden lavarse sin problemas con un programa hasta de 70ºC. Un buen truco que te ayudará a conservar mejor su suavidad y su tacto mullido, consiste en sumergirlas en agua salada durante unas horas, y luego darles un buen enjuague.
Limpieza y Mantenimiento tapicerías:
-Eliminar manchas en tapicería fija: Para eliminar las manchas, por ejemplo del sofá, primero debes secarla con un papel absorbente y, después, aplicar un quitamanchas en seco. Para asegurarte que la tela no pierde color, prueba siempre antes en una zona poco visible.
-Tanto en la tapicería fija, como la desmontable, si sólo puede lavarse en seco, recurre a un producto o servicio especializado. Es mejor contratar un profesional, ya que si lavas con agua un tejido de este tipo, no podrías volverlo a su estado original, ya que la tela se deforma y encoge.
-Fundas de sofá: Las tapicerías desmontables de butacas y sofás, puedes lavarlas en la lavadora si el tejido te lo permite. Para ahorrarte esfuerzos, es mejor que vuelvas a colocar las fundas cuando todavía estén un poco húmedas.
- Eliminar el polvo: para eliminar el polvo de cualquier tapizado, basta repasarlo con un cepillo de cerdas blandas. También puedes usar la aspiradora a media potencia, con el accesorio de tapicería y sin frotar demasiado.
- Lavar zonas expuestas al roce: En un sofá o butaca, hay zonas más propensas a ensuciarse, como zona de apoyabrazos y cabeza. Puedes recuperarlas si frotas estas zonas con un paño humedecido en éter y las cubres con un poco de sal mojada.
Cortinas y edredones:
-Cuidados para las cortinas: el polvo que se acumula en as corinas de tela, se elimina pasando una aspiradora a baja potencia con el cepillo para cortinas. Si hay alguna mancha, trátala localmente con un paño humedecido con vinagre ( blanco)o alcohol. Los visillos de puntillas, tejidos u organza, pueden ser lavados con cuidado, a mano. Si son blancos, puede agregarse unas pocas gotas de lavandina,. Si tienen bordados, plánchalos al revés para preservar su relieve.
-Para las cortinas largas; es importante evitar que se arruguen durante el lavado. Es preferible lavarlas de a una. En algún contenedor grande ( puede ser en la bañera). Si tienen tintes, las primeras veces es preferible lavarlas entre 40ºC y 60ºC, para fijar los colores. Si la cuelgas cuando todavía están húmedas, su propio peso las alisará.
Si tienes dudas, recurre a un lavadero especializado ( tintorerías).
-Mantener bien las fibras sintéticas: Las fibras sintéticas (poliéster, nylon…) dan solidez a los colores, y dureza y elasticidad a cualquier tejido. Conviene lavar estas prendas con agua fría y procurar no retorcerlas. Es mejor colgarlas a la sombra y pasarles plancha tibia.
-Conservar bien los edredones: Es muy probable que el edredón, como colchas o las cortinas, sobrepase la capacidad del lavarropas. En ese caso, se puede lavar en la bañera. Es importante que lo dejes escurrir bien antes de tenderlo, para que el peso no deforme las fibras.
-Relleno nórdico: Es aconsejable sacudir con frecuencia los nórdicos con relleno de plumas para redistribuirlas de forma homogénea, ya que tienden a apelmazarse, reduciendo el aislamiento térmico. Para ello, usa un cepillo sueva y descarta emplear la aspiradora.
Por último: para aromatizar los textiles de tu hogar, recurre a suavizantes con el aroma que más te guste. También, puedes utilizar fragancias naturales especiales para telas, que puedes agregar en tu último enjuague o , en el momento del planchado, en los casos que puedas usar plancha. Si colocas laurel o lavandas en tus cajones y estantes, además de aromatizar las telas, combatirás las polillas.
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